Patrimonio cultural marino, Dinamarca. Proyecto de fotografía y vídeo I Publicación

A lo largo de 2018, mis amigas Anna y Edda reclutaron a un grupo de voluntarios para devolver al Frigg su antiguo esplendor. El Frigg estaba a punto de ser llevado a un museo marítimo danés, pero Anna se negó a aceptar que ese fuera el fin de los días de este velero en el mar, así que lo convirtió en su hogar y pidió ayuda estatal para que volviera a estar en condiciones de navegar.

Durante el verano, acampamos, cocinamos, desatornillamos y atornillamos el Frigg, lo pulimos (sí, es un ella), lo barnizamos pieza a pieza, navegamos en el Orion, leímos libros, buceamos en basureros y nadamos desnudos como niños recién nacidos.

En un momento dado éramos unos 20 aprendiendo de Niels, nuestro capitán, mientras nos contaba su vida en los siete mares. Y así se concibió nuestra tripulación pirata The Friggers: Annacondom, Deadda, Spiros Spiratis, Malagueña Salerosa, Deadly Dal, Lady Elsa y varios más encantamos las noches con canciones de la luna roja.

Los Friggers representan el intento de rescatar las historias centenarias de quienes han navegado por Frigg, siguiendo el eco de las voces de sus marineros, grabadas en el crujido de la madera. Que la marea nos acompañe.